Este domingo, Punto D se convirtió en un espacio de encuentro y generosidad con la primera jornada de «Manos que Cobijan», donde mujeres de todas las edades se reunieron con un propósito claro: tejer mantas para quienes más lo necesitan.
Cada cuadrado de lana tejido durante la jornada será parte de frazadas que llegarán a familias en situación de vulnerabilidad, demostrando que la solidaridad se construye puntada a puntada.
El evento no solo fue una jornada de trabajo colectivo, sino también un momento para compartir. Entre charlas, música, juegos y bingo, se fortalecieron lazos, se aprendieron nuevas técnicas y se reafirmó la importancia de ayudar. ¡Gracias por ser parte!